La Restauración sucede al Primer Imperio y determina el regreso de la
monarquía y de los Borbones a París. Los reyes aceptan limitar su poder y
garantizar algunas libertades mediante la Carta de 1814. Los dos
hermanos pequeños de Luis XVI se suceden en el poder. Luis XVIII reina
de 1814 a 1824, periodo interrumpido por los Cien días, del 20 de marzo
al 22 de junio de 1815, tiempo durante el cual Napoleón I regresa al poder,
antes de la derrota de Waterloo que marca el final definitivo de su
reinado. Carlos X se instala posteriormente en el trono de Francia, de
1824 a 1830. La Restauración finaliza con la revolución de julio de 1830
que conduce a la abdicación de Carlos X.
Tras una larga crisis ministerial y posteriormente parlamentaria, el rey
Carlos X, autor de un golpe de fuerza constitucional el 25 de julio de
1830, pone al pueblo de París en su contra. Durante el 27, 28 y 29 de
julio de 1830, estas jornadas fueron bautizadas como las "Tres Gloriosas", los
amotinados erigen barricadas en las calles y se enfrentan al ejército en
sangrientos combates que provocan más de mil muertos. Carlos X y la
familia real huyen de París. Los diputados liberales controlan la
revuelta popular y hacen admitir la instauración de la monarquía
constitucional. ¡A rey muerto, rey puesto! La dinastía de los Borbones es suplantada por la dinastía de los Orleáns, con Luis Felipe I. Sin
embargo, la monarquía ya no es absolutista y la bandera blanca cede de
nuevo el paso a la bandera tricolor, realzada por el gallo galo. El rey
de Francia es a partir de entonces el rey de los franceses.
Tras 1789 y 1830, llega la tercera revolución que se desarrolla en
París, el 23, 24 y 25 de febrero de 1848. Mientras la monarquía de Julio
estaba en crisis y aumentaban las protestas, un tiroteo mortal aviva la
insurrección: París se subleva tras el llamamiento de los liberales y de
los republicanos. Los amotinados se hacen con el control de la capital.
Luis Felipe se niega a reprimir este levantamiento, vertiendo más sangre (350 muertos, 500 heridos). Forzado a abdicar, el monarca desea ceder el poder a su nieto, algo que rechazan los revolucionarios. Así que el 25 de febrero de 1848, se proclama la II República.
Durante sus primeros meses de existencia, la II República estuvo dirigida por un gobierno provisional. Este periodo inicial estuvo marcado por la abolición de la esclavitud en las colonias francesas y por la instauración del sufragio universal masculino. Pero una grave crisis económica provocó la miseria entre los obreros que se sublevan en junio de 1848. Esta insurrección fue reprimida violentamente por las tropas del gobierno de Cavaignac.
Luis Felipe se niega a reprimir este levantamiento, vertiendo más sangre (350 muertos, 500 heridos). Forzado a abdicar, el monarca desea ceder el poder a su nieto, algo que rechazan los revolucionarios. Así que el 25 de febrero de 1848, se proclama la II República.
Durante sus primeros meses de existencia, la II República estuvo dirigida por un gobierno provisional. Este periodo inicial estuvo marcado por la abolición de la esclavitud en las colonias francesas y por la instauración del sufragio universal masculino. Pero una grave crisis económica provocó la miseria entre los obreros que se sublevan en junio de 1848. Esta insurrección fue reprimida violentamente por las tropas del gobierno de Cavaignac.
Tras la proclamación de una nueva constitución el 4
de noviembre, se celebra la elección del presidente de la República el
10 de diciembre de 1848. Las urnas dan por elegido al sobrino de
Napoleón I, Carlos Luis Napoleón Bonaparte. Después de dos intentos de
golpe de Estado contra la monarquía de Julio, había tenido que exiliarse
a Brasil, y posteriormente a Estados Unidos, hasta llegar finalmente a
Inglaterra. De regreso a Francia, logra ser elegido gracias al recuerdo
del I Imperio, a la división de las izquierdas y a los votos del partido
del Orden.
El 2 de diciembre de 1851, el Príncipe-presidente Carlos Luis Napoleón
Bonaparte se hace con todos los poderes mediante un golpe de Estado. Un
año más tarde, el 2 de diciembre de 1852, restaura el Imperio y reina
entonces bajo el título de Napoleón III.
Que se casó con Eugenia de Montijo, una española de armas tomar, a pesar de la candidez del retrato. Pues hay una
Eugenia de Montijo que va mas allá de las empalagosas películas y
canciones que hemos conocido aquí en España, tan dada a edulcorar los
aspectos menos amables de los miembros de la nobleza. La verdadera Eugenia era contradictoria y torrencial capaz de las aventuras más heroicas,
como costear de su propio bolsillo la apertura del canal de Suez o
contribuir personalmente con sus ideas a la remodelación de París. Pero
también de las más insensatas, como la creación de un imperio en Méjico.
Eugenia encendió muchas de las luces que hoy nos alumbran, desde lo
pequeño a lo grande: inspirar al modisto Worth, crear el color malva, la
gastronomía, el maquillaje para mujeres, los ojos delineados con kohl, el
uso de aparatos para modelar la figura, los regímenes para adelgazar,
los gorros de cocinero, los menús escritos en un papel en el plato de
los invitados, los brillantes en chatones, el estilo Napoleón III e
incluso tuvo tiempo, lápiz y papel en mano, de dibujar un mueble nuevo:
el puf.
Eugenia de Montijo, que fumaba, bebía como un soldado en recuerdo de su juventud perdularia, se hacía traer de España garbanzos en valija diplomática, nadaba en el mar y enseñaba los tobillos, asistía con indiferencia a las infidelidades de su marido, diagnosticado como un “torturado de la carne” por su médico personal, el doctor Conneau, hasta el punto de que tuvieron que diseñarle una silla especial para practicar el sexo. Pero dejémonos de cotilleos y sigamos con Napoleón III, que mezclando autoritarismo y política social, pretende modernizar el país y su capital. Influenciado por su estancia en Londres, que le ha concienciado respecto a los problemas de urbanismo, fue el promotor de profundas transformaciones en París. Hecho prisionero en Sedan, el 2 de septiembre de 1870, por Prusia y los demás estados alemanes, a quienes había declarado la guerra el 15 de julio de 1870, fue destituido de su trono. Se proclama la III República el 4 de septiembre.
Eugenia de Montijo, que fumaba, bebía como un soldado en recuerdo de su juventud perdularia, se hacía traer de España garbanzos en valija diplomática, nadaba en el mar y enseñaba los tobillos, asistía con indiferencia a las infidelidades de su marido, diagnosticado como un “torturado de la carne” por su médico personal, el doctor Conneau, hasta el punto de que tuvieron que diseñarle una silla especial para practicar el sexo. Pero dejémonos de cotilleos y sigamos con Napoleón III, que mezclando autoritarismo y política social, pretende modernizar el país y su capital. Influenciado por su estancia en Londres, que le ha concienciado respecto a los problemas de urbanismo, fue el promotor de profundas transformaciones en París. Hecho prisionero en Sedan, el 2 de septiembre de 1870, por Prusia y los demás estados alemanes, a quienes había declarado la guerra el 15 de julio de 1870, fue destituido de su trono. Se proclama la III República el 4 de septiembre.
Tras la firma del armisticio que pone fin a la guerra franco-prusiana
(28-29 de enero de 1871) que preve ceder Alsacia y Lorena a los Estados
alemanes, pero París se niega a someterse. El 18 de marzo marca el
comienzo de la insurrección popular, llamada la Comuna de París. Este
episodio acaba trágicamente con la Semana sangrienta (30000 muertos y
numerosas deportaciones a Nueva Caledonia).
La Comuna se convierte en mito para los revolucionarios del mundo entero que cantan entonces la Internacional, escrita por Eugène Pottier en junio de 1871, con música de Pierre Degeyter, en 1888 y difundida en los años 1880-1890.
La III República es el régimen político francés más longevo desde 1789. Fue
proclamada el 4 de septiembre de 1870, tras la derrota de Sedan y la
caída del Segundo Imperio. Sin embargo, se considera que no empezó
verdaderamente hasta 1875, después de una lucha entre monárquicos,
bonapartistas y republicanos, cuando la enmienda Wallon, que menciona la
palabra "República", fue adoptada con una amplia mayoría: "El
Presidente de la República se elige por mayoría absoluta de los
sufragios, por el Senado y la Cámara de los Diputados, reunidos en
Asamblea Nacional. Será nombrado por siete años y es reelegible".
Formada por
banqueros y prestamistas, empresarios industriales, médicos, dentistas,
ingenieros, arquitectos, químicos, gerentes de
instituciones públicas y privadas (empresas, academias y hospitales) ,
fabricantes, maestros, enfermeras, comerciantes y tenderos (dueños del atelier
y la boutique, o gerentes de los grandes almacenes de nueva creación, casas de
venta por correo, las cooperativas de minoristas y cadenas de tiendas),
contadores, vendedores y oficinistas.
El estilo de vida parisino de clase media se caracterizó por una vivienda
confortable y acudir a restaurantes de lujo. A finales de
siglo, la mayoría de las familias de clase media eran dueños de sus propios
hogares. La familia promedio de clase media tenían a 10 o más
empleados trabajando a su servicio. Su
primer entretenimiento se centraba en el comer, es decir celebrar opíparas comidas o cenas, con amigos e
invitados importantes y que a menudo para evitar conflictos de asistencia, cada familia elegía un día diferente de la semana para celebrar sus eventos para evitar conflictos
de programación. En los meses cálidos, se realizaban salidas al campo
preparadas y servidas por el servicio doméstico. La clase media parisina estimuló
el desarrollo estético de la cocina francesa mientras acudían a comer con más frecuencia a los restaurantes públicos. En 1900, en una guía de restaurantes de París
aparecen casi 1.000 lugares para comer en la ciudad. Los cambios en los gustos
culinarios y los patrones de comedor indican los cambiantes valores sociales
y culturales de la burguesía parisina.
Las tiendas de comestibles más prósperas se ubican en los distritos residenciales más de moda (Chaussee Dantin, Palais-Royal, rue Vivienne, Saint-Avoie, y Saint-Meni) y son propiedad de unas pocas dinastías familiares importantes. Durante el siglo 19, en París, el número de locales de venta de café aumentó en un 600%, las tiendas de comestibles aumentaron en un 400%, el número de carnicerías aumentaron un 300%, mientras que las panaderías aumentaron en número en un 200%. Los comerciantes a veces producen los bienes vendidos (mermeladas, pastas, dulces y confituras, y café). Las mujeres a menudo gestionan las tiendas mientras sus maridos trabajaban fuera del hogar en una gran empresa; en 1900, más de 165.000 de los comerciantes parisinos son mujeres. A mediados del siglo XIX, el teatro se ha convertido en el pasatiempo favorito de la clase media; las producciones más populares retratan a los hombres y mujeres de la clase alta y las reglas de la clase media que rompen con la conducta sexual y social. La oferta teatral se amplia para satisfacer la demanda, y se incluye el vodevil, artistas callejeros, músicos populares, cómicos, malabaristas y titiriteros; algunos realizan hasta 10 funciones en un día.
¿Y que pasaba con la clase más desfavorecida? Durante
gran parte del siglo 19, las condiciones de vida de la clase baja eran
espantosas. Tanto los trabajadores no calificados hombres y mujeres tienden a
tener mayores tasas de mortalidad debido a los problemas médicos derivados de
las condiciones insalubres de trabajo, el abuso generalizado de alcohol, la
violencia relacionada con el alcohol, los numerosos accidentes de trabajo, y la delincuencia
urbana. Las familias pobres vivían en
apartamentos de una habitación, llegando a alojarse hasta 12 individuos de una misma familia. Los patios de los edificios están llenos de excrementos que se
venden y transportan a los agricultores para usar como fertilizante. La gente que viene del entorno rural, acostumbrados a las condiciones insalubres en sus
fincas toleran sus nuevas, pero miserables viviendas de la ciudad. Muchas
familias del campo estaban acostumbrados a no bañarse en el invierno, y sólo de
vez en cuando se bañaba en verano.
El
matrimonio legal, que había sido poco frecuente en las familias de clase baja,
se hizo más común, estimulado principalmente por el aumento de los ingresos que
reducía la carga económica de los cónyuges y los hijos. En el hogar, las mujeres
controlaban las finanzas de la familia, tomaban las decisiones nacionales que
tratasen sobre la educación de los hijos, la instrucción religiosa, los muebles de la
casa, y si se debía tomar un realquilado para tener ingresos adicionales. Algunas
mujeres retrasan el matrimonio, la elección de permanecer en el servicio
doméstico el mayor tiempo posible, pues las condiciones de vida de estas mujeres son mucho mejores al estar menos expuestas a las enfermedades con sus
empleadores de la clase media que con los familiares de la clase baja. Estas
mujeres también tienden a tener familias más pequeñas ya que se suele aplazar
tener niños hasta que ya son más mayores. Una de los cocineras de Claude Monet,
Marguerite, era tan valorada en la casa que cuando se casó, Monet empleó
inmediatamente a su nuevo marido, Paul, como un mayordomo para evitar perderla.
Así es como está la sociedad parisina de la época, en un momento previo a la Revolución Industrial, cuando aparecen un gran número de artistas y pintores mundialmente famosos. Y casi todos suelen pertenecer a familias con posibles, como el caso de Gustave Caillebotte (1848-1894) que nació en una familia acomodada. Curso estudios como arquitecto naval. Pero se dedicó a la pintura mientras exhibía y vendía
sus propias pinturas con éxito, también se convertía en un gran mecenas de los
pintores impresionistas y post-impresionistas compañeros suyos, particularmente de Paul
Cézanne (1839-1906), Edgar Degas (1834-1917), Claude Monet (1840-1926), Camille
Pissarro (1830-1903), Pierre Auguste Renoir (1841-1919), y Alfred Sisley
(1939-1899), compró muchas de sus obras y las donó a la nación de
Francesa después de su muerte. Sus amistades con Monet y Renoir eran muy
cercanas y personales. Hay la creencia de que Ciallebotte generosamente se sacrificó por sus amigos pintores al no incluir sus obras, que son excelentes y de la misma temática que podían tener las obras de Monet, en las exposiciones colectivas que hacía. Su carrera como empresario y marchante de arte fue muy exitosa, y era perseguido por las mujeres para cazarlo en matrimonio, pero él consiguió ser un solterón empedernido.
Saint Honore (Pissarro) |
Otro caso es Henri de Toulouse-Lautrec que procedía de una de las familias francesas más destacadas,
su madre era la condesa Adele de Toulouse-Lautrec-Montfa. Nacido como un aristócrata,
Lautrec creció al abrigo de parientes hasta los veinticinco años, pero llevaba una doble vida, alternando entre el alojamiento con su madre, y las fiestas de sus realquilados en su buhardilla de París. Su vida salvaje terminó joven,
víctima del alcoholismo y las enfermedades venéreas.
Camille Pissarro (1830-1903) nació en las Antillas Holandesas de padres judíos ricos, pero ofendió a su familia casándose con alguien de clase baja, se casó con Julie Vellay, una hija de agricultores, que había trabajado como sirvienta y cocinera ayudante en la casa de sus padres; Juntos criaron gallinas, conejos, palomas, y una familia de ocho hijos en un suburbio parisino de clase media. Pissarro fue un hombre modesto que se trasladó junto a su familia, y también generosamente proporcionó un hogar para su madre, sus hermanos y sus familias en Londres desde 1870 hasta después de la guerra franco-prusiana.
Alfred Sisley (1939-1899), nació en París, hijo de padres ingleses ricos. Se educó en Inglaterra, pero volvió a Francia para pintar como un adulto; que había logrado cierto éxito financiero como artista, pero fue dejado en la indigencia por las tropas invasoras en 1870. Monet acogió a Sisley en su casa por un corto tiempo, alrededor de un año, Sisley pintó y vendió al menos cincuenta y nueve lienzos y temporalmente recuperó su antigua posición financiera. Su amante, la florista Eugenie Lescouezec, y que luego sería su esposa, le dio dos hijos. Al final, murió pobre y no alcanzó el éxito profesional y financiero duradero en su vida. Sus imágenes suelen se de mujeres de clase alta en su vida doméstica y pública, asistiendo a conciertos y ópera, ataviadas según la moda parisina del momento.
Camille Pissarro (1830-1903) nació en las Antillas Holandesas de padres judíos ricos, pero ofendió a su familia casándose con alguien de clase baja, se casó con Julie Vellay, una hija de agricultores, que había trabajado como sirvienta y cocinera ayudante en la casa de sus padres; Juntos criaron gallinas, conejos, palomas, y una familia de ocho hijos en un suburbio parisino de clase media. Pissarro fue un hombre modesto que se trasladó junto a su familia, y también generosamente proporcionó un hogar para su madre, sus hermanos y sus familias en Londres desde 1870 hasta después de la guerra franco-prusiana.
Alfred Sisley (1939-1899), nació en París, hijo de padres ingleses ricos. Se educó en Inglaterra, pero volvió a Francia para pintar como un adulto; que había logrado cierto éxito financiero como artista, pero fue dejado en la indigencia por las tropas invasoras en 1870. Monet acogió a Sisley en su casa por un corto tiempo, alrededor de un año, Sisley pintó y vendió al menos cincuenta y nueve lienzos y temporalmente recuperó su antigua posición financiera. Su amante, la florista Eugenie Lescouezec, y que luego sería su esposa, le dio dos hijos. Al final, murió pobre y no alcanzó el éxito profesional y financiero duradero en su vida. Sus imágenes suelen se de mujeres de clase alta en su vida doméstica y pública, asistiendo a conciertos y ópera, ataviadas según la moda parisina del momento.
la familia Bellini (Degas) |
No es el único que pinta a las familia de la clase alta. Degas en 'La Familia Bellini" nos pinta un
retrato de una familia de clase alta la
imagen de la mujer que encarna la noción de decoro y respetabilidad y que la
gente de clase burguesa superior se esfuerzan en mantener. La escena está impregnada de una atmósfera de fría indiferencia,
totalmente sin emociones, que es un símbolo de muchas familias de la clase alta
de la época. Otras imágenes de mujeres de clase alta representan la
domesticidad y participan en actividades de ocio., como serían las obras: Le Déjeuner dans le
sevre; Lección de piano;,El Balcón, Patinaje.
Hilaire Germaine Edgar Degas nace en París el 19 de julio de 1834. Su familia paterna era de origen franco-italiano y se dedicaba a la Banca, mientras que la de su madre estaba vinculada con el negocio del algodón en Nueva Orleans. Edgar será el primogénito de una familia que se verá aumentada con tres nuevos retoños, dos niñas y un niño. La relación con su madre debió ser muy estrecha, afectándole enormemente su pérdida en 1847, cuando el joven tenía trece años. Dos años antes había sido matriculado en el Lycée Louis-le-Grand, en régimen de internado hasta su graduación, siete años después. Su padre, Auguste, deseaba que Edgar cursara estudios de Derecho, a pesar de haber demostrado su talento como dibujante en sus años en el Lycée. Durante un corto periodo de tiempo accedió a los deseos paternos, matriculándose en Derecho, pero pronto se cansó, abandonó el hogar familiar y se instaló en un estudio. Vistos los deseos del joven, su padre decidió financiar el aprendizaje artístico de Edgar, reconociendo su error inicial.
Hilaire Germaine Edgar Degas nace en París el 19 de julio de 1834. Su familia paterna era de origen franco-italiano y se dedicaba a la Banca, mientras que la de su madre estaba vinculada con el negocio del algodón en Nueva Orleans. Edgar será el primogénito de una familia que se verá aumentada con tres nuevos retoños, dos niñas y un niño. La relación con su madre debió ser muy estrecha, afectándole enormemente su pérdida en 1847, cuando el joven tenía trece años. Dos años antes había sido matriculado en el Lycée Louis-le-Grand, en régimen de internado hasta su graduación, siete años después. Su padre, Auguste, deseaba que Edgar cursara estudios de Derecho, a pesar de haber demostrado su talento como dibujante en sus años en el Lycée. Durante un corto periodo de tiempo accedió a los deseos paternos, matriculándose en Derecho, pero pronto se cansó, abandonó el hogar familiar y se instaló en un estudio. Vistos los deseos del joven, su padre decidió financiar el aprendizaje artístico de Edgar, reconociendo su error inicial.
Degas entabla una relación con Mary Cassatt - algunos la llegan a considerar como su alumna, (pues es una de las pocas mujeres aceptada en el grupo de artistas de la época), - quien le recomienda integrarse en el grupo impresionista. A partir de ese momento su estilo se acerca más a Renoir
y a Degas, participando en cuatro de las ocho exposiciones
impresionistas con sus cuadros de niños y mujeres, temas que serán sus
favoritos. En 1891 empezó su andadura en solitario en la galería
Durand-Ruel, quien se convirtió en su marchante. Debido a su desahogada
situación económica, Mary compró un buen número de obras a sus
compañeros e incluso animó a algunos millonarios norteamericanos a que
invirtieran en pintura impresionista. Sus continuos viajes la llevan a
numerosos lugares europeos e incluso a Oriente Medio. A partir de 1912
se pone de manifiesto en Mary una ceguera parcial que provocará la
pérdida progresiva de su visión, abandonando la pintura desde ese momento
en el que empieza a recibir honores como la Legión de Honor francesa o
la medalla de oro de la Pennsylvania Academy of Art. Gracias a su
trabajo, el Impresionismo se introdujo con fuerza en los Estados Unidos.
También destaca su faceta como grabadora en la que muestra una marcada
influencia de la estampa japonesa.
Le déjeuner des canotiers (Renoir) |
Bajo la III República la ciudad sigue creciendo, pero es preciso esperar a finales de siglo para que la capital recupere su dinamismo, este será el periodo conocido como la "Belle Epoque", Paris, será junto con Viena, el centro cultural de Europa y del mundo.
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